miércoles, 6 de noviembre de 2013

Mi primera vez...

Hoy me he autolesionado por primera vez... Bueno, antes ya me había hecho daño un par de veces, pero esta ha sido la primera vez que jugué con una cuchilla.

Todo empezó cuando llegué de mis clases de por las tardes y entré a casa. Un extraño y dulce olor se coló en mi nariz; chocolate. No solo chocolate, sino chocolate con churros... Con el frío que hacia fuera, aquello era demasiado agradable...
Entré a la cocina y mi madre me preguntó si quería. Ya por instinto respondí "no" de forma automática, pero ellos volvieron a insistir una y otra y otra vez, hasta que caí.
Comí chocolate, churros, donuts, bollos... Una vez que empecé me fue imposible parar...

Cuando ya arrasé con todos los dulces, empezó la culpa. Mi estómago dolía mucho, y eso era la prueba de que había hecho algo muy malo...
Ya he contado que nunca he sido capaz de provocarme el vómito y sigo sin ser capaz, aunque lo intenté. En lugar de eso cogí una de las cuchillas de afeitar, la desmonté y saqué una de las brillantes y afiladas partes. Cerré los ojos y la pasé despacio por mi cadera hasta que la sentí rasgar la fina piel... Abrí los ojos y vi unas pequeñas gotas de sangre... No había dolido tanto como yo pensaba, y me sentí un poco mejor...
Al igual que con la comida, una vez que empecé no pude parar... Arañé mi muñeca izquierda y mi cadera de nuevo hasta que estuve satisfecha. Luego lloré en silencio, como siempre.
Para terminar, guardé a mi nueva amiga en una pequeña cajita, que ahora vendrá siempre conmigo, y salí del baño con la mejor de mis sonrisas postizas...

No me siento orgullosa pero en estos momentos lo único que soy capaz de hacer es llevar una muñequera para
ocultar mi muñeca herida y fingir que nada ha pasado...

No hay comentarios:

Publicar un comentario